Tras las operaciones militares en Cauca y Nariño, disidencias de las Farc estarían llegando a zonas de Huila y Tolima. Son 2 departamentos en los que aún hay cese al fuego entre el grupo criminal y las Fuerzas Militares
Tras la ofensiva de la fuerza pública contra el Estado Mayor Central (EMC) de las disidencias de las FARC, de alias Iván Mordisco, durante el fin de semana, se registraron combates en departamentos como Huila y Tolima en los que no aplica la suspensión de cese al fuego.
Estos enfrentamientos se dan en el marco de la reactivación de las operaciones militares de la fuerza pública contra este grupo criminal, que habían mantenido un cese en estas regiones. En el combate se expresó la muerte de un integrante de la disidencia en Garzón, Huila y la captura de importantes personajes en Chaparral, Tolima, entre ellos el socio del líder de la estructura y la recuperación de un menor.
El 26 de marzo del presente año, en horas de la mañana, se confirmó que, tras enfrentamientos en el festivo de ramos, se continúa una confrontación entre él estas disidencias y el Ejército Nacional, en la vereda El Paraíso, departamento del Huila.
Los ataques, que fueron respondidos por el Ejército, habrían sido hechos por tropas de las disidencias que se movilizaron desde el Cauca, bastión del grupo criminal de Mordisco y en donde la fuerza pública concentra sus ataques, tras el levantamiento del cese al fuego en este departamento, Valle del Cauca y Nariño.
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La operación está bajo la coordinación del propio comandante de las Fuerzas Militares, general Helder Giraldo Bonilla, quien entregó un parte de tranquilidad a las comunidades y explicó apartes de las operaciones que se adelantan en el territorio. “Se han puesto a disposición cerca de 32.000 hombres y mujeres, así como medios aéreos como el Avión Fantasma, drones y helicópteros UH60 Black Hawk, de la Aviación del Ejército y la Fuerza Aérea. También embarcaciones de la Armada para el movimiento de tropas y vigilancia de los afluentes y el mar Pacífico”, explicó.
Las fuerzas militares, han intervenido 7 laboratorios para el procesamiento de droga, 29 mil matas de hoja de coca en semillero, más de 1.100 galones de pasta base de coca en proceso, 4.500 kilogramos de hoja de coca, 1.321 galones de insumos líquidos y 863 kilogramos de insumos sólidos.
Además de este grupo, las Fuerzas Militares se enfrentan al Clan del Golfo, señalado por el general Giraldo como una organización criminal en expansión, dedicada al narcotráfico, la minería ilegal y la extorsión. Existe una operación específica para capturar a alias Chiquito Malo, considerado el sucesor de Otoniel al frente del Clan del Golfo.
