La Federación Nacional de Cafeteros confirmó el deceso del campesino de 58 años que representó a Juan Valdez por casi dos décadas
Hay luto en Colombia por cuenta del fallecimiento de Carlos Castañeda, quien durante 20 años personificó al icónico Juan Valdez. El campesino murió a los 58 años de edad, en la clínica Las Vegas, en donde se recuperaba de una cirugía del corazón. Era un cafetero de la vereda de San Bartolo, ubicada en el municipio de Andes del departamento de Antioquia.
Fue la Federación Colombiana de Cafeteros la que confirmó el deceso. “Tenemos que comunicar la triste noticia del fallecimiento de nuestro amigo Carlos Castañeda, quien por 20 años estuvo al frente del personaje Juan Valdez. Carlos, gran y comprometido compañero de trabajo, nos deja también con los mejores recuerdos. Extendemos un fraternal saludo de condolencias a su familia y amigos”, escribió la federación en la red social X.
El personaje de Juan Valdez fue creado en 1958 por la agencia de publicidad Doyle Dane Bernbach para representar al típico caficultor colombiano. Anteriormente, el papel había sido interpretado por el cubano José Duval entre 1959 y 1969, el antioqueño Carlos Sánchez entre 1969 y 2006, y Carlos Castañeda, quien acaba de morir.
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El día de su presentación como Juan Valdez, Carlos Castañeda, que en ese entonces tenía 39 años, dijo lo siguiente: “Soy andino, vivo en la vereda San Bartolo y mi vida cotidiana es como la de cualquier campesino. Me levanto entre las cinco y las seis de la mañana, cojo café, deshierbo, echo abono y hago el trabajo de cualquier campesino”. En su momento, Castañeda reconoció que el café era la esencia de su vida, la de sus abuelos, padres y toda su familia. “Yo tengo mi corazón y mis ganas de hacer las cosas bien”, expresó.
German Bahamon Jaramillo, gerente de Fedecafeteros, le dedicó unas emotivas palabras a Castañeda en sus redes sociales. Mencionó que fue “un ser humano absolutamente especial, con quien tuve la fortuna de compartir en mi visita a todos los departamentos cafeteros de Colombia y otros países en el mundo. Su sonrisa era la manifestación más pura de su alma. Carlos caracterizó a Juan Valdez y era fiel representación de la bondad, el tesón y humildad del cafetero colombiano”. “Dios lo tenga en su santa Gloria, le permita el descanso eterno y le dé la fortaleza a su familia para aceptar sus designios. Abrazo solidario”, agregó.
Su partida deja un hueco en la industria cafetera colombiana, pero su legado perdurará como inspiración para las futuras generaciones de caficultores y amantes del café en todo el mundo.
